Guía para el enmascarado del vehículo

El enmascarado del automóvil representa un paso crucial para proteger las partes que no deben ser pintadas, garantizando así resultados profesionales en el proceso de pintura de un vehículo.

¿Cómo enmascarar la carrocería?

Antes de enmascarar el vehículo, es fundamental limpiar cuidadosamente la superficie para garantizar que las cintas adhesivas y las películas se adhieran correctamente, evitando así infiltraciones de pintura. 

Igual de importante que limpiar la carrocería es secarla perfectamente para que no quede rastro de polvo, suciedad ni humedades.
La aplicación de los materiales debe ser muy meticulosa para obtener un acabado profesional de calidad.

Recuerda que una revisión cuidadosa de toda el área enmascarada antes de la pintura puede prevenir errores costosos.

Selección y aplicación de los materiales de enmascarado automotriz

Los materiales más utilizados para el enmascarado del automóvil incluyen cinta adhesiva específica para carrocería, papel o plástico para cubrir superficies más amplias, y almohadillas o esponjas para espacios estrechos. 

La selección precisa de los materiales de enmascarado es fundamental para asegurar que la pintura de la carrocería se realice con precisión, evitando superposiciones o infiltraciones de pintura en áreas no destinadas a ser tratadas.

Cinta adhesiva para enmascarado

Elegir la cinta de enmascarar más apropiada es muy importante. De hecho, existen variedades específicas destinadas al uso automotriz que resisten altas temperaturas, solventes y no dejan residuos adhesivos una vez retiradas. 

Es importante también elegir el ancho adecuado de la cinta según la superficie a cubrir, asegurándose de que se adhiera perfectamente a los bordes sin crear pliegues donde la pintura podría infiltrarse.

KMK Refinish ofrece varios tipos de cinta carrocero:

KMK - cinta moldura

Papel y película para enmascarado

Para cubrir áreas amplias de la carrocería, se utiliza papel para enmascarado o películas de plástico, cortadas a medida y fijadas con cinta adhesiva.

La aplicación debe hacerse con mucho cuidado, para cubrir completamente las áreas no destinadas a la pintura, asegurándose de sellar bien todos los bordes. En la fase de aplicación, es importante superponer ligeramente las cintas y películas para crear una barrera impenetrable a la pintura.

El papel para enmascarado suele estar hecho de una hoja resistente y flexible, tratada para resistir la humedad y los agentes químicos presentes en las pinturas. Está disponible en diferentes anchos y longitudes para adaptarse a las dimensiones de las piezas a proteger, y puede modelarse y doblarse fácilmente para adaptarse a los contornos de la superficie. El papel para enmascarado ofrece una protección confiable contra salpicaduras y goteos de pintura, garantizando un acabado limpio y profesional.

La película para enmascarado está hecha de un material plástico delgado y transparente, que permite ver la superficie subyacente durante la aplicación de la pintura. Esto permite un enmascaramiento preciso y exacto de las áreas a proteger, reduciendo al mínimo el riesgo de errores y defectos. La película se adhiere firmemente a la superficie gracias a su naturaleza adhesiva, proporcionando una barrera confiable contra la penetración de la pintura.

Ambos materiales, papel o película, son fácilmente removibles una vez completada la operación de pintura, sin dejar residuos o dañar la superficie subyacente.

KMK - papel y película de enmascarar

Burlete adhesivo

El burlete adhesivo es otro componente fundamental en el proceso de enmascarado. Se trata de una cinta o cuerda elástica, generalmente hecha de material sintético como goma o silicona, caracterizada por una textura esponjosa.

Su función principal es proteger las áreas circundantes a la superficie a pintar, proporcionando un límite claro y preciso para evitar desbordes y fugas de material durante la aplicación.

El burlete se adapta perfectamente a los contornos de las superficies, puertas y capós, garantizando una línea de separación definida entre el área a pintar y la que se debe preservar.

Gracias a su estructura suave y flexible, se aplica fácilmente y se adhiere firmemente, evitando el riesgo de deslizamientos o movimientos durante el uso. Además, su textura porosa permite absorber cualquier exceso de pintura u otros materiales, contribuyendo a obtener resultados de acabado más uniformes y profesionales.

KMK- burlete de espuma

Finalmente, para áreas particularmente complejas o pequeñas, como logotipos o cerraduras, se pueden utilizar materiales específicos como líquidos de enmascarado que, una vez secos, crean una barrera protectora fácilmente removible después de la pintura.

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